26/01/2023
El huerto en enero: Enero es un mes crucial para nuestro huerto y, aunque parezca un mes de absoluto letargo, no lo es. Es un mes clave, pues es durante este periodo que debemos planificar el huerto que deseamos tener en primavera.
Así que, si lo que quieres es cuidar tu huerto en enero, protegerlo del frío y saber qué plantar esta temporada, toma nota de nuestros consejos para triunfar este invierno.
Tareas del huerto en enero
Proteger del frío:
El huerto en invierno exige algunos cuidados especiales. Enero es un mes frío, con heladas y nevadas. Proteger nuestro huerto del frío es fundamental, especialmente los semilleros, las plantas más sensibles y los brotes más jóvenes. Descubre más consejos sobre cómo proteger tu huerto del frío aquí.
Recolectar:
Enero también es temporada de recoger productos muy nutritivos, que suelen salir de forma escalonada, como los brócolis, las coles, repollos, coliflores y coles de Bruselas.
Plantar:
También se puede plantar en enero, en semilleros, eso sí. Es una buena época para empezar a ir plantando lechugas, remolachas, acelgas, perejil, cebollas, guisantes, espinacas, habas. Descarga nuestro calendario de siembras.
Planificar el huerto:
Aunque sea un mes de poca actividad en el huerto, enero debe ser un mes de mucha planificación. Empieza a planificar los próximos cultivos que deseas para primavera y verano y ve preparando todo lo que necesitas para que tu huerto esté listo en la siguiente estación. Recuerda que lo que haces hoy en tu huerto afectará directamente a tu huerto de mañana. Ciertos cultivos pueden mejorar la calidad del suelo y tienen un efecto positivo sobre los próximos cultivos.
¿Necesitas ayuda para planificar tu huerto? Nosotros estamos listos para ayudarte y asesorarte sobre los diferentes ciclos de los cultivos, además de ofrecerte todo tipo de planta hortícola, completamente ecológica y semillas autóctonas.
21/11/2022
El huerto escolar viene conquistando espacio en los centros educativos, cada vez más colegios y guarderías empiezan a preparar junto a sus alumnos un rincón destinado a los cultivos. Y no es para menos, estas instalaciones pueden adaptarse a todo tipo de centro y son perfectas para trabajar una infinidad de temas y valores muy importantes para los niños y niñas.
¿Qué es un huerto escolar?
Un huerto escolar es una zona de cultivo que está bajo los cuidados de los alumnos y profesionales del centro escolar. En estas instalaciones, los alumnos y alumnas pueden cultivar todo tipo de verduras, frutas y hortalizas a la vez que trabajan una serie de temas transversales de su educación.
Los huertos escolares son verdaderos laboratorios vivos en los que los alumnos pueden aprender en la práctica diferentes asignaturas, además de valores muy importantes como la perseverancia, el respeto, el trabajo en equipo y el cuidado del medio ambiente.
Beneficios del huerto escolar
Fomenta el cuidado del medio ambiente
A trabajar al aire libre en contacto con la tierra y las plantas, el huerto escolar ayuda a fomentar el cuidado del medio ambiente y de la naturaleza. Además, los alumnos pueden aprender a aprovechar residuos, convirtiendo las sobras orgánicas en abono, por ejemplo.
Fomenta el trabajo en equipo
Un huerto saludable demanda una serie de tareas en las que los niños necesitarán ayuda mutua. Así que trabajarán valores como el compañerismo y el trabajo en equipo, además, desarrollarán un fuerte sentido de la responsabilidad.
Estimula los sentidos y la coordinación y habilidades motrices
En un huerto escolar, por más pequeño que sea, los alumnos pueden aprender a través de sus sentidos, tocando, oliendo, viendo y probando los alimentos que cosechan. Es todo un universo sensorial.
Igualmente, realizarán pequeñas labores ideales para trabajar las habilidades motrices.
El esfuerzo en el huerto escolar
Un huerto escolar es perfecto para que los niños y niñas aprendan el verdadero valor del esfuerzo, del trabajo y de la perseverancia. Asimismo, podrán entender mejor cómo se producen los alimentos que tienen en casa, adquiriendo respeto por el trabajo de los agricultores/as y el campo.
Alimentos saludables y de temporada
Sembrar, plantar y cultivar sus propios alimentos es una excelente forma de enseñar sobre hábitos de vida saludables y una alimentación equilibrada. Es una forma de poner al alcance de estos niños, diferentes alimentos saludables. Además, el cuidado de un huerto no deja de ser una actividad física al aire libre, así que es una actividad perfecta para que los alumnos se muevan combatiendo el sedentarismo.
¿Te animas a preparar un huerto escolar en tu centro? Descarga nuestro calendario de siembras, haznos una visita y empieza a planificar tu huerto escolar.
Descubre más consejor para crear tu primer huerto aquí.
19/10/2022
Cultivar en un huerto ecológico tiene una infinidad de ventajas, pero antes de hablar sobre algunas de ellas es importante entender cómo el huerto ecológico viene reconquistando espacio en el campo e, incluso, en las grandes ciudades.
Con el paso de los años, el avance de la industria, la globalización y un consumo desenfrenado, empezamos a darnos cuenta de nuestro impacto en el planeta. Son muchos los indicios que nos hacen pensar en ponerle freno a algunos hábitos. Cada vez se habla más sobre el cambio climático, sobre eficiencia energética, reciclaje, consumo responsable, etc. Los huertos ecológicos también han ganado fuerza, no solo por nuestra necesidad de alimentarnos con alimentos más saludables, pero también por su positivo impacto ambiental.
Características del huerto ecológico
Los huertos ecológicos tienen como gran propósito proveer alimentos de forma artesanal, sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
En un huerto ecológico no se usan pesticidas ni ningún otro tipo de producto químico, el abono debe ser siempre natural y el cultivo suele ser destinado al autoconsumo.
Ventajas del huerto ecológico
Suelos más ricos
En los huertos ecológicos no se utilizan pesticidas sintéticos. Los pesticidas no son dañinos únicamente para nuestra salud. La mayoría de estos productos van directamente al suelo, arrasando a miles de microorganismos fundamentales para la biodiversidad del planeta. Estos productos químicos penetran en la profundidad del suelo y dañan de forma irreversible a organismos subterráneos primordiales para el equilibrio natural. Un suelo saludable y vivo filtra el agua, recicla los nutrientes, es alimento y regula la temperatura de la Tierra.
Además, al emplear siempre abonos orgánicos, se incrementa la calidad de la tierra, aumentando la fertilidad del suelo, asegurándonos cosechas cada vez mejores.
Alimentos más ricos y más saludables
Los alimentos cosechados en un huerto ecológico son más saludables, puesto que están totalmente libres de residuos químicos dañinos como los pesticidas químicos. De esta forma, los alimentos provenientes del huerto ecológico conservan sus propiedades nutricionales intactas. Además, suelen ser más ricos, con sabores y aromas más intensos.
Conciencia ambiental
Llevar un huerto ecológico es una excelente forma de hacernos más conscientes de nuestro impacto en el medio ambiente. Ampliamos nuestra conexión con la tierra, aprendemos nuevas formas de utilizar los recursos naturales y evitar el desperdicio.
Más salud mental
El cuidado del huerto también puede traernos beneficios a nuestra salud mental. Estudios científicos han evidenciado que este tipo de labor puede reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, promoviendo cambios significativos en nuestra salud mental y calidad de vida.
Combate los efectos del cambio climático
Con un enfoque sostenible y respetuoso, la agricultura ecológica es capaz de reducir los efectos del calentamiento global y las emisiones de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso. Se ha comprobado que los suelos con producción ecológica pueden emitir hasta un 40% menos de gases de efecto invernadero por hectárea que los cultivos convencionales.
¿Te animas a empezar tu propio huerto ecológico? ¡No dejes de visitarnos a la hora de elegir tus cultivos! ¡Te ayudaremos encantados!
23/08/2022
El huerto en agosto es el huerto de la abundancia. Es tiempo de mucho cuidado con las altas temperaturas y posibles tormentas, pero a la vez, es temporada de cosechas y recolecciones.
Agosto también es el mes perfecto para empezar a planificar los cultivos de otoño y preparar el terreno. Así que es un mes completo y de mucho trabajo en el huerto.
Para dejártelo más fácil, hemos preparado un listado con algunas tareas típicas de esta temporada para que puedas disfrutar de un agosto en el huerto y todas sus ventajas. ¡Sigue leyendo!
Tareas para el huerto en agosto:
Planificar y preparar cultivos
Aprovecha el mes de agosto para planificar la próxima temporada. Es hora de ir pensando en los cultivos de otoño, planificando el terreno e incluso preparar semilleros.
Siembra
En agosto se pueden sembrar cebollas, coles, lechugas, acelgas, calabacines, escarolas, espinacas, nabos, zanahorias, rabanitos y rúcula. También puedes empezar a trasplantar coliflor, cardo, tomates y brócolis.
Las recolecciones del huerto en agosto
Agosto es un mes de abundancia en el huerto. Es hora de disfrutar de muchísimos cultivos. Con el calor, los cultivos crecen cada vez más rápido y podrás llevar a la mesa una gran variedad de sabores. Agosto es perfecto para recolectar pimientos, berenjenas, tomates, pepinos, calabacines, judías, remolachas, lechugas, sandías, melones, etc.
Malas hierbas
Recuerda, agosto es el mes de la abundancia. Con las altas temperaturas y la luz solar todo crece a alta velocidad, TODO, las malas hierbas también. Así que es un mes para vigilar y cuidar. Controlar el crecimiento de las malas hierbas y realizar a menudo un desherbado manual es una tarea obligatoria este mes. El calor también convierte agosto en la época favorita de algunas plagas, así que hay que estar muy presente en el huerto y dedicarle muchas horas de trabajo.
Si necesitas ayuda para planificar tu huerto esta temporada, consulta nuestro calendario de siembras o haznos una visita. Estaremos encantados de ayudarte a dar vida a tu huerto.
30/06/2022
El riego es un elemento fundamental en la agricultura. Cuando pensamos en agricultura ecológica, el riego tiene un significado aún más importante al tratarse de un recurso naturalmente escaso e imprescindible para la vida.
En un huerto ecológico buscamos siempre un uso eficiente y respetuoso del agua. Por eso es tan importante planificar nuestros cultivos, estudiar las características topográficas del terreno, el tipo de suelo y determinar el origen del agua antes mismo de empezar nuestro huerto.
Orígenes y características del agua para el riego
De la misma manera que debemos conocer a fondo el suelo, el terreno y nuestros cultivos, es crucial tener información sobre el agua.
Fuente de agua
El agua puede venir de ríos o arroyos, pozos, depósitos artificiales, precipitaciones, nacientes o del grifo.
Cantidad disponible
Según el origen del agua, puedes descubrir si tendrás agua disponible en cantidad para todo un ciclo de producción o si necesitarás más de una fuente.
Calidad del agua
Al igual que en el punto anterior, el agua puede cambiar según su origen. El agua de la lluvia es muy diferente al agua de un pozo que puede contener más cal, por ejemplo. Así que la calidad del agua se mide según las sales disueltas en ella.
Propiedad legal
Según su localización, puede que sea necesario tramitar diferentes licencias para utilizar el agua para los cultivos.
Sistemas de riego para la agricultura
Son muchos los sistemas para regar disponibles, lo ideal es encontrar el sistema que mejor se adapte a las necesidades de los cultivos y a las características de las plantas.
Hoy hablaremos de 3 sistemas de riego ampliamente conocidos:
1. Riego por goteo
El riego por goteo consiste en mojar solamente la zona deseada a través de tuberías por las que circula el agua. El riego por goteo, como el propio nombre lo sugiere, emite un goteo constante y regular que va mojando el suelo, por lo que es necesario un sistema de bombeo para regular la presión del agua.
2. Riego por aspersión
En el riego por aspersión el agua es dispensada en forma de lluvia. El sistema también está compuesto por tuberías principales y secundarias. En algunos casos, las tuberías pueden ser móviles y desplazarse por la parcela de manera automática.
Para que el riego por aspersión funcione también se necesita un sistema de bombeo.
En este sistema, el agua cae sobre los cultivos, por eso no es recomendable para las plantas muy sensibles a la humedad o al ataque de hongos.
3. Riego por superficie
Uno de los sistemas más antiguos y populares. En este caso, el riego se da a través de la gravedad o escurrimiento del agua, una vez que es el propio suelo el encargado de guiar el agua desde el punto de origen del suministro hasta los puntos de riego.
La distribución del agua se da por medio de tuberías en el suelo, canales o acequias. Es un método más económico en lo que se refiere a instalación y mantenimiento, aunque requiere un mayor uso del agua y un mayor esfuerzo para preparar, planificar y nivelar la parcela.
¿Qué técnica sueles utilizar o piensas implementar en tu huerto?